20.1.06

el zumbido del silencio



hoy escuché.
fuerte la radio, fuerte hablo, fuerte el golpe en la pared.
pisadas, portazos, teléfonos celulares inoportunos.
conversaciones telefónicas poco privadas, gritos, bolsas.
no nos dábamos cuenta cómo hacíamos tanto ruido.
no era tan difícil
callarse un poquito
y escuchar.

en la foto: mochila, la gata que maulla despacito

18.1.06

El poder de los últimos días de abril en pleno enero.

Hoy me di cuenta que last days of april me resulta una banda perfecta para dos cosas en particular:
escuchar mientras se viaja en bus
musicalizar el final de una película

De la razón primera me di cuenta, como puede parecer lógico, mientras viajaba en bus y los escuchaba. El camino se movía con ese ritmo que no varía mucho dentro de cada canción y que va rápido o lento pero siempre tranquilo. El camino recordaba a otros viajes que no llevaban esa música pero que si se hubiesen grabado, la música de fondo ideal habría sido last days. Con esto podía crear una serie digna de warner chanel o de sony en sus mejores tiempos…
De la segunda razón me di cuenta hoy. Me di cuenta hoy hace unos 30 minutos…
Caminaba por llo lleo, el lugar entre pueblo y ciudad en el que viví hasta hace un año, cuando me fui a estudiar a santiago… no lo dejé completamente, volvía los fines de semana y para las vacaciones (de hecho ahora estoy acá)[mejor será ignorar lo obvio que resulta el contenido del paréntesis]. Y el hecho es que hoy caminaba luego de haber ido a comprar queso para la pizza al supermercado que nunca cierra y cuyo nombre pocos conocen (ya lo han cambiado tantas veces…) escuchando el Angel youth. Recordaba miles de momentos en que había hecho ese mismo camino, siempre en distinto estado anímico y con distintas historias a cuestas… resumía, rescataba, salvaba. Por sobre todo, salvaba.
Concluía y llegaba a un final. Tenía que encontrar el final perfecto para la película en ese momento. La música estaba, no podía ser más adecuada, ahora yo caminaba, aceleraba el paso y cerraba la película. Miro a la parroquia y la idea está, la idea florece. Camino rápido y me freno frente a Ese rayado de Esa foto. Lo miro, sonrío… es verdad, es feo pero tiene corazón… camino hacia atrás de la parroquia y miro lo que fue la sede de scout de mi grupo por mucho tiempo… me devuelvo y empiezo a caminar a mi casa. La panadería de las caritas y los huesitos. De los berlines antes de ir a la iglesia un día frío y muy raro. La casa holandesa en la que podría preparar para mis nietos todos los kuchen que me propusiera… suma y sigue. Mi colegio, la casa abandonada en cuya puerta algunos publicaban amenazas, la ex pastelería que ahora es lavandería, el perro que me sigue, el camino de tierra que cuando tenía miedo o estaba muy feliz bajaba corriendo mientras todos los perros ladraban… un señor arriba de un poste trabaja. La casa de la vecina que siempre me saluda tan sonriente, el bruno que corre a recibirme… la puerta, saco las llaves. Abro y la película se ha terminado. Con la música perfecta, la película se ha terminado.

Recomiendo:
Angel Youth.
Ascend to the Stars.

9.1.06

el patito.


el pato es el que sale en la foto.
no sé si él aprende algo de mí, ojalá así sea. por otro lado, yo con verlo ya aprendo algo, con verlo y sentir toda la energía que me transmite ya me cambia el día y el ánimo.
yo creo que con él no sólo me acuerdo de sueños que tuve y que llevé a otros lados, no sólo me lleno de ganas de hacer lo que siento... sino que también descubro el poder que tienen (tenemos) las personas por sobre los otros... las caras que ponemos, las palabras que decimos y cómo las decimos... todo lo que hacemos frente a otros se transforma en energía... y por eso ahora me fijo y a veces me la pienso y a veces me preocupo. por eso no es que finja, pero cuando quiero transmitir lo que voy sintiendo dejo que corra toda la energía que deba correr, que salga la risa y la sonrisa, que mis ganas lleguen al otro.
de verdad que creo que todo es energía. que no sólo se siente cuando estás frente al otro, sino que cuando deseas algo relacionado con ese otro, él lo sentirá... que cuando pienses en el otro a él le llegará algo, como una mano haciéndole cariño en la cabeza...
al pato, muchas gracias.
porque el pato sí que deja que la energía se le note, deja que cuando uno lo mire salga de su sonrisa ese abrazo de siempre.